La Intendencia de Paysandú tiene previsto actualizar su normativa para luchar contra la contaminación sonora que producen los escapes libres de las motocicletas.
Según la jefa comunal, la legislación actual data de la década de 1950 y no contempla el ruido producido por las motos. La iniciativa surge a raíz de la denuncia de un grupo de vecinos que residen en la circunvalación de la plaza General Artigas, quienes aseguran que hay días en los que los ruidos se tornan “insoportables”.-La comuna sanducera, la Jefatura de Policía del departamento y distintas organizaciones sociales están llevando a cabo una serie de reuniones a los efectos de elaborar un proyecto que será enviado a la Junta Departamental en vistas a actualizar la normativa actual.La reglamentación vigente es extremadamente antigua y no condice con la realidad que hoy en día se vive en el mundo, indicó a El Espectador la intendenta de Paysandú, Helena Heizen. La jerarca indicó a El Espectador que los vecinos de la plaza se sienten damnificados por el ruido que producen las motos con caño de escape libre, sin silenciador. “Lo primero que surge es que hay un desajuste muy grande entre la realidad actual y la normativa, tanto departamental como nacional, que a veces no nos da los instrumentos para poder actuar con prontitud en situaciones de excesos. Y concretamente, en el tema de ruidos molestos está legislado en lo que tiene que ver con fiestas y espectáculos públicos, pero nada con respecto a los ruidos que se pueden generar por el tránsito”, explicó.En este sentido, Heinzen indicó que los inspectores de tránsito no están habilitados a multar por ruidos molestos.