Con 62 años de vigencia, la “Ordenanza de construcción y reconstrucción de veredas” que además obliga a la Intendencia a controlar el mantenimiento en buen estado de las veredas, prácticamente no se estaba aplicando, y así lo demuestran muchas veredas de la ciudad de Paysandú y de otros centros urbanos departamentales donde también rige esta disposición municipal.
Ahora, y por unanimidad de los 30 ediles presentes en sala cuando se trató el tema, los sanduceros siguen obligados -y con renovados bríos reglamentarios- a construir o reconstruir las veredas de los frentes de los terrenos, así estén identificados o no.
El decreto original, que incluye todos los detalles necesarios para que la reglamentación sea muy clara y no haya confusiones, establece ya en su primer artículo que “los propietarios de predios (…) están obligados a construir veredas a su exclusivo cargo” y también “a mantenerlas en buen estado de conservación”.
Ahora, y por unanimidad de los 30 ediles presentes en sala cuando se trató el tema, los sanduceros siguen obligados -y con renovados bríos reglamentarios- a construir o reconstruir las veredas de los frentes de los terrenos, así estén identificados o no.
El decreto original, que incluye todos los detalles necesarios para que la reglamentación sea muy clara y no haya confusiones, establece ya en su primer artículo que “los propietarios de predios (…) están obligados a construir veredas a su exclusivo cargo” y también “a mantenerlas en buen estado de conservación”.