Como medida gubernamental, las principales ciudades Francesas, París y Marsella, implementaron la prohibición de rezos y oraciones en vía pública, pues la laicidad debe ser favorecida, comentó el ministro del Interior Claude Guéant a los representantes Católicos, Judíos, Musulmanes, Budistas, Ortodoxos y Protestantes.La reunión que congregó a las principales religiones del mundo y Francia, expuso el tema del desenvolvimiento de la religión, pues la laicidad está favorecida en la constitución, aunque las reformas a la libertad de cultos favorecen también a las diferentes comunidades.mas