La explosión de una o dos bombas de gran potencia cerca de la sede del gobierno en Oslo y un tiroteo en un campamento laborista causaron ayer al menos 87 muertos y numerosos heridos, en lo que parece un ataque coordinado contra el corazón de Noruega.Según la policía noruega, siete personas murieron y dos resultaron heridas de gravedad en una explosión ocurrida en pleno corazón de la capital, en un barrio donde se encuentra la oficina del primer ministro Jens Stoltenberg, que no estaba en ella en ese momento.Según varios testimonios, la policía habló de "una o dos bombas".mas