La Justicia determinó que una vez que la compañí supo que el empleado estaba enfermo lo confinaron a una oficina pequeña sin ventanas y más precaria "por el riesgo a la exposición profesional", según explicó la empresa. Ahora le debe pagar por "afectar su dignidad" |
La Cámara Nacional del Trabajo condenó a una empresa de telefonía a pagar 40.000 pesos a un empleado, portador de HIV, al que le asignó un lugar pequeño y sin ventanas porque, por su enfermedad, solo podía realizar tareas reducidas y livianas.La Sala V del tribunal concluyó que la firma, de capitales extranjeros, "violó el deber de ocupación, pues no le brindó ocupación efectiva al trabajador" y "no demostró que realmente no tuviera ninguna labor que (el empleado) pudiera cumplir de acuerdo a su estado de salud".mas |
"Primero nos ignoraron, luego se rieron de nosotros, después nos atacaron... entonces vencimos "
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