Cinco nuevos intendentes afrontan la tarea de "poner la casa en orden". Arcas deficitarias, desorden administrativo y maquinaria en estado casi ruinoso. Con ese panorama se encontraron los intendentes de Artigas, Florida, Paysandú, Salto y Treinta y Tres, donde hubo cambio de partido gobernante. En Paysandú, el gobierno del nacionalista Bertil Bentos se encontró con dificultades. Cuando el secretario general, Horacio De los Santos, ingresó a su oficina no tenía "ni lápiz o una goma". "Tuvimos que salir a comprar todo porque no habían dejado nada", se quejó el funcionario (ver nota relacionada). Al cruce de estas declaraciones salió hoy el ex intendente frenteamplista, Julio Pintos, quien dijo que si lo declarado por De los Santos es verdad, "tiene $ 100 millones en el Banco República para comprar. Dejamos una caja de U$S 5 millones y cuando ingresamos había sólo U$S 2 millones y una situación financiera comprometida". Pintos defendió su gestión y en entrevista con radio Carve afirmó que se entregó una Intendencia ordenada y que se ha capitalizado en lo que es su funcionamiento. "Estamos tranquilos que en cinco revertimos una tendencia de 15 años de gobierno del Partido Nacional que venía en franco deterioro, en cuanto a capitalización y financiamiento". MAS