En los últimos días antes del arrebatamiento se caracterizaran por la
propagación fuerte del engaño a través de las falsas doctrinas (Según 1ª Tim. 4:1 y 2ª Tim 3:1) obviamente, esto será obra de Satanás a través de sus demonios esparcidos por todo el mundo. Creo que por eso la Biblia nos advierte contra esa mala semilla llamada:
HEREJIA.
I. ¿QUE ES UNA HEREJIA?
A. Es distorsionar el significado verdadero de la palabra de Dios.
B. Es la falsa interpretación de ideas erróneas en cuanto a la Biblia.
II. ¿CUAL ES EL PELIGRO?
A. Naufragar en cuanto a la fe. (1ª Tim. 1:19-20) Himeneo y Fileto se desviaban de la fe en Jesús por causa de la falsa doctrina.
B. Distorsiona el verdadero significado de la Palabra esto no permite el crecimiento espiritual
C. Aparta al Cristiano de su Iglesia, de su Grupo y hasta de su relación con Dios.
III. ¿QUÉ HACER?
A. Leamos, reflexionemos y obedezcamos la palabra de Dios diariamente
B. Congregarnos en el templo y por las casas para ser alimentados por la palabra de Dios
C. Todo lo que oigamos por la radio o leamos en algún libro llevémoslo y comparémoslo con la Biblia, si esta lo respalda creámoslo y sino rechacémoslo.
D. Cuidado con aceptar estudios bíblicos de personas que estemos o no estemos seguros que tengan una mala orientación.
propagación fuerte del engaño a través de las falsas doctrinas (Según 1ª Tim. 4:1 y 2ª Tim 3:1) obviamente, esto será obra de Satanás a través de sus demonios esparcidos por todo el mundo. Creo que por eso la Biblia nos advierte contra esa mala semilla llamada:HEREJIA.
I. ¿QUE ES UNA HEREJIA?
A. Es distorsionar el significado verdadero de la palabra de Dios.
B. Es la falsa interpretación de ideas erróneas en cuanto a la Biblia.
II. ¿CUAL ES EL PELIGRO?
A. Naufragar en cuanto a la fe. (1ª Tim. 1:19-20) Himeneo y Fileto se desviaban de la fe en Jesús por causa de la falsa doctrina.
B. Distorsiona el verdadero significado de la Palabra esto no permite el crecimiento espiritual
C. Aparta al Cristiano de su Iglesia, de su Grupo y hasta de su relación con Dios.
III. ¿QUÉ HACER?
A. Leamos, reflexionemos y obedezcamos la palabra de Dios diariamente
B. Congregarnos en el templo y por las casas para ser alimentados por la palabra de Dios
C. Todo lo que oigamos por la radio o leamos en algún libro llevémoslo y comparémoslo con la Biblia, si esta lo respalda creámoslo y sino rechacémoslo.
D. Cuidado con aceptar estudios bíblicos de personas que estemos o no estemos seguros que tengan una mala orientación.