La enorme plantilla de la IMM, que supera los 8.000 funcionarios, y la excesiva burocracia constituyen una pesada carga para los contribuyentes, coinciden fuentes de todo el espectro político.
Más de US$ 7.500 gasta diariamente la Intendencia sólo en llamadas telefónicas, según informó el edil colorado Alberto Jar Sánchez. En 2007, Sánchez denunció que "la Intendencia gasta US$ 756.000 en salarios por día laborable". Si bien la plantilla ha disminuido con relación a 1990, la comuna paga al contratar servicios con diversas ONG (Movimiento Tacurú, Asociación Civil Arco Iris, Centro de Participación Popular, entre otras) que realizan trabajos propios de la Intendencia, como limpieza y barrido. Algunos de esos "contratos", que se realizan en carácter de "donaciones modales", han sido varias objetados por el Tribunal de Cuentas. El sindicato Adeom calcula que los servicios municipales involucran al doble de las personas que figuran en la plantilla.