"Esto e
s una bomba", decía la nota contenida en un sobre que abrió una funcionaria del consulado venezolano en Rio de Janeiro. La misiva la habría entregado "un muchacho de el Correo", según contó a EL PAÍS digital Adrián Naya, administrativo del consulado uruguayo, que se encuentra en el mismo edificio, un piso debajo de las oficinas de Venezuela. Además, el mensaje de la nota tenía "contenido político", afirmó Edgar González, cónsul general del país caribeño en Brasil, pero no especificó más sobre el mismo, sino que se limitó a decir que confía en que la Policía de Río va a investigar el caso. El hecho ocurrió a las 9.45 horas (la oficina uruguaya abre a las 10),
relató Naya. "Desalojen el predio", decía la misiva. Y así se procedió por parte del cuerpo anti-bomba de la Policía carioca. En el edificio, además de los consulados de Uruguay y Venezuela, también están instalados los de México, Países Bajos y Paraguay. Entre los cinco suman unas 60 personas. Los efectivos detonaron la bomba "en una fuente grande que no funciona" y que se encuentra enfrente al edificio de las oficinas consulares, contó Naya. La situación volvió a la normalidad, sin tener que lamentar heridos y, según el funcionario, si bien la bomba no era de gran potencia, sí podría haber lastimado a una persona. El cónsul venezolano en Rio de Janeiro dijo a EL PAÍS digital que las relaciones entre su país y Brasil "son óptimas y no se van a ver afectadas" por este hecho. Además, aclaró que no sospechan "de nadie". Por otra parte, mañana entre los consulados se reunirán para extremar medidas de seguridad, ya que no es la primera carta que llega con tono agresivo. "No hay seguridad como tiene el consulado de Estados Unidos", dijo Naya, quien agregó que "hace años robaron el consulado de México" y "hace unas semanas llegó otro sobre con una nota donde (alguien) se ofrecía para matar a (Álvaro) Uribe (presidente de Colombia) si el cónsul de Venezuela le pagaba US$ 30.000". El País Digital
s una bomba", decía la nota contenida en un sobre que abrió una funcionaria del consulado venezolano en Rio de Janeiro. La misiva la habría entregado "un muchacho de el Correo", según contó a EL PAÍS digital Adrián Naya, administrativo del consulado uruguayo, que se encuentra en el mismo edificio, un piso debajo de las oficinas de Venezuela. Además, el mensaje de la nota tenía "contenido político", afirmó Edgar González, cónsul general del país caribeño en Brasil, pero no especificó más sobre el mismo, sino que se limitó a decir que confía en que la Policía de Río va a investigar el caso. El hecho ocurrió a las 9.45 horas (la oficina uruguaya abre a las 10), 
relató Naya. "Desalojen el predio", decía la misiva. Y así se procedió por parte del cuerpo anti-bomba de la Policía carioca. En el edificio, además de los consulados de Uruguay y Venezuela, también están instalados los de México, Países Bajos y Paraguay. Entre los cinco suman unas 60 personas. Los efectivos detonaron la bomba "en una fuente grande que no funciona" y que se encuentra enfrente al edificio de las oficinas consulares, contó Naya. La situación volvió a la normalidad, sin tener que lamentar heridos y, según el funcionario, si bien la bomba no era de gran potencia, sí podría haber lastimado a una persona. El cónsul venezolano en Rio de Janeiro dijo a EL PAÍS digital que las relaciones entre su país y Brasil "son óptimas y no se van a ver afectadas" por este hecho. Además, aclaró que no sospechan "de nadie". Por otra parte, mañana entre los consulados se reunirán para extremar medidas de seguridad, ya que no es la primera carta que llega con tono agresivo. "No hay seguridad como tiene el consulado de Estados Unidos", dijo Naya, quien agregó que "hace años robaron el consulado de México" y "hace unas semanas llegó otro sobre con una nota donde (alguien) se ofrecía para matar a (Álvaro) Uribe (presidente de Colombia) si el cónsul de Venezuela le pagaba US$ 30.000". El País Digital