echo clarísimo de corrupción en el que el tráfico de recién nacidos ocupa el primer lugar.De acuerdo a la información oficial que obra en nuestro poder, varias personas, entre ellas profesionales de la salud, son interrogadas por la Policía y la Justicia Penal.Si bien en torno a estos hechos existe un profundo hermetismo en esferas oficiales, LA REPUBLICA pudo confirmar con voceros altamente calificados, que autoridades del principal centro hospitalario de nuestro departamento radicaron las correspondientes denuncias ante la autoridad policial.Tal situación derivó, en que los investigadores ya procedieran a realizar las primeras citaciones de distintas personas, entre ellas médicos pediatras y personal de enfermería.El detonante de esta situación habría sido luego de la internación de una joven que reside en una ciudad del Este de nuestro país. La muchacha, luego de dar a luz una beba, abandonó dicho centro asistencial, el Hospital Escuela del Litoral "Galán y Rocha".La criatura, así nos fue informado, quedó con la profesional que asistió el parto, pero sin ningún tipo de trámite legal de adopción, lo cual implica un delito, así fue indicado a LA REPUBLICA por expertos en el tema. MASEL MISMO DIARIO Lunes, 15 de febrero, 2010 (ENTER)
Lo que hizo Wolman en el hospital de Paysandú no debiera ser más que un modus operandi habitual en la política de transparencia que pretende llevar a cabo la izquierda. Sin embargo, su gesto dice mucho, ya que las irregularidades en la administración pública, muchas veces son el resultado de situaciones enquistadas por años o décadas, de confusión entre lo público y lo privado, en las que el tráfico de influencias y el uso de los bienes públicos como si fuera propios han sido parte de la construcción política del Estado. El gesto de desenmascarar esta situación, y hacerle frente, habla de la valentía de esta mujer que ahora le propone a los sanduceros, ser una alternativa, dentro de la propia izquierda, a la reelección de Julio Pintos, el actual intendente