Néstor Kirchner se murió de repente en un apacible día feriado, reservado para otra cosa. Su inesperada partida dejó con la boca abierta a quienes aplaudían su liderazgo y a los que lo combatían con fervor digno de mejores causas. La muerte tiene el poder de atribular por igual a los que aman y los que odian. Debe ser porque, sin importar los sentimientos, uno entiende que no hay forma de eludirla.La historia se encargará de juzgar el aporte que el ex presidente le hizo al país y la contribución de su proyecto a la construcción de la Argentina de principios del siglo XXI. En la inmediatez de estas jornadas de duelo, NK modificó el estado de ánimo, eclipsó el censo que tantas discusiones previas había provocado y desalojó de la tele a Marcelo Tinelli.Desde el preciso momento del anuncio del fallecimiento del santacruceño, el cable y los canales de aire tuvieron que mandar a la papelera de reciclaje los segmentos escogidos de la pelea Escudero-Alé, el strip dance de Belén Francese y los habituales pasos de comedia del conductor de Showmatch.La desaparición de Kirchner obligó a cambiar la siesta recargada de batallas interminables entre jurados que ..........mas