La cifra surge de un estudio de la Cepal y Unicef, que toma en cuenta
scolaridad, así como la tenencia de radio, televisión o teléfono y acceso a electricidad."La pobreza infantil total es una expresión de la exclusión social y el mecanismo por medio del cual esta se reproduce. Si bien los niños que están en situación de pobreza moderada no sufren un deterioro serio en sus condiciones de vida, ven mermadas sus oportunidades futuras", señalaron Ernesto Espíndola y María Nieves Rico, autores de la investigación.De acuerdo a los investigadores, la mala nutrición, el rezago y el abandono escolar, la falta de expectativas y la discriminación que sufren por ser pobres, no sólo afectan sus derechos en el presente, sino que harán que su situación cuando adultos los lleve a reproducir la precariedad en su bienestar y, por tanto, afecte a las generaciones siguientes.El estudio señala, además, que dado que la pobreza se manifiesta en muchos aspectos, la respuesta de los Estados para enmendarla debe ser igualmente multidimensional. Las privaciones severas y moderadas de la población infantil pueden ser subsanadas con una intervención estatal directa para, entre otras cosas, garantizar la provisión de servicios de salud y nutrición, acceso a agua potable y saneamiento, y a través de medidas indirectas mediante el aumento de los ingresos del hogar", explicaron Espíndola y Rico.FUENTE: EFE
