Los 100 días de Mujica

Dicen los que saben que los primeros cien días de cualquier gobierno son determinantes. En ese plazo los gobernantes encuentran una ciudadanía apacible, el sistema político paciente, y los problemas cotidianos postergables. La era Mujica transitó estos días aprovechando al máximo estas variables y salvo por algún tema puntual, ha sobrellevado este lapso con una aprobación mayor a la que me imaginaba el año pasado. Mucho simbolismo, mucha mano tendida, mucha retórica unitaria, y lo más destacable es que el Presidente deja en cada una de las demasiadas palabras que emite diariamente la sensación de estar por encima de la cuestión chiquita de la política partidaria. Mensajes como la integración de la oposición para controlar los entes públicos, el cambio radical en el combate a la delincuencia, el convencimiento de modificar el aparato del estado y la prioridad en la búsqueda de inversiones son algunos ejemplos de temas que le aportaron a esta nueva administración buena parte de consensos y buena prensa. mas